Arideth Reitz

Nombre
Arideth
Edad
20

Elemento
Viento

Habilidades y Rango
Haizea –Alto
Viento Oscuro –Medio
Proyección -Medio

Normalmente puede parecer seria y equilibrada, pero cuando se empecina con algo es difícil que desista de llevarlo a cabo. Su carácter suele parecer contradictorio de acuerdo a las situaciones, pero aunque parezca que cambia de opinión lo cierto es que sus ideales permanecen intactos. Una vez que algo se le mete en la cabeza es difícil que lo ignore y no para hasta que ha acabado con todas sus opciones. Orgullosa, Obstinada y le suele importar poco lo que otros piensen. Rara vez se interesa en algo o en alguien con demasiado ímpetu, pero cuidado cuando lo hace porque su necedad puede sobrepasar los límites normales. Muchas veces caprichosa, con una plena confianza en sí misma, desconfiada y bastante orgullosa.

Durante la guerra el odio y el resentimiento de unos contra otros era lo habitual, un elemental de fuego conoció a la que sería la madre de sus únicos dos hijos. Traicionando su deber, le salvó la vida, pues le había cautivado su belleza y la expresión de su rostro. Se ocultaron lejos, en las tierras lejanas en el reino del agua. No podía ser una vida tranquila entre aquel caos, pero aquel hombre hizo todo lo que estaba en su mano por mantener su hogar a salvo. Aquella elemental tuvo a un par de mellizos, un niño y una niña.
Los hermanos pasaron los primeros años de su vida en relativa calma. Fue una noche, cuando tenían apenas seis años que su padre llegó, apresurado y bastante preocupado. Siendo unos niños no entendieron bien lo que pasaba. Aquel hombre se despidió de Arideth, diciéndole las palabras más bonitas que jamás ha escuchado en su vida. Fue en esa ocasión cuando se separaron. Su padre los llevó hasta el reino del viento y una vez que las dejó en un lugar que consideró seguro, se marchó con su hermano. Al cual no volvería a ver hasta que pasaron los años.
Habían decidido que la mejor forma de mantenerlos a salvo era separándose. A él le buscaban por haber abandonado su posición en el ejército del fuego, ella estaría a salvo lejos de él. Arideth heredó los poderes de la raza de su madre, siendo ella misma quien le enseñó el uso y control de éstas a lo largo del tiempo que la tuvo con ella. El muchacho, al que habían nombrado Arisai había nacido con las habilidades de un elemental de fuego, fue por ello, que su padre se lo llevo consigo, en lugar de dejarlo con su madre como hubiese querido.
Su madre murió en los últimos años de la guerra en un ataque al lugar en el que habitaban. Como consecuencia, Arideth resultó herida y tardó varios meses en recuperarse. Justo cuando la paz comenzaba recibió un mensaje de su hermano, avisándole en donde se encontraba y diciéndole que estaba a salvo. Sin embargo, no mencionó nada de su padre. Cuando se vieron, la muchacha no se atrevió a preguntarle. El tiempo que habían estado separados había marcado a ambos. Pero más que a ella, él parecía haber pasado por algo que no estaba dispuesto a decirle, no necesitaba demasiado para saberlo, desde el momento en que lo vio pudo sentirlo. No dijo nada antes de regresar al reino del viento. Aunque empezaron a verse con regularidad, decidió dejar el asunto de su padre hasta que él estuviese dispuesto a hablar.

- Tiene una cicatriz que le atraviesa la espalda, que es lo que le recuerda aquel día en el que su madre pereció. Es un mal recuerdo que aunque quiere olvidar, con esa marca recordándoselo no puede hacerlo.