Consecuencias? [Chris] +18

Abrió los ojos de golpe encontrándose en aquellas tierras. La cabeza le dolía demasiado como para pensar en lo que había sucedido. Se incorporó sentándose en el pasto y llevándose una mano a la cabeza. Tardó todavía más de la cuenta en darse cuenta de que no estaba solo. Casi dio un salto cuando vio a la persona que estaba con él, de golpe y con todo y el dolor que sentía en su cuerpo se puso de pie rápidamente -Lo siento... de verdad lo siento... - Sabía que de nada valía disculparse -No he sido yo... De ver... - Se detuvo. ¿Qué tan probable era que le creyera? Ni siquiera recordaba nada de qué había pasado y como estaba controlando de nuevo su cuerpo, pero a juzgar por las punzadas de dolor no había sido nada bueno.

-Yo... iré a hablar con esa chica después... para disculparme y explicarle... - Había bajado la mirada No sabía que decir y sentía que si seguía hablando no servía de nada. alzó la mirada enfrentandose a esos ojos azules -Pero no sé cómo puedo disculparme ante usted, Su Majestad... por haber causado esto... - No era su culpa, pero vamos, eraresponsable si tomaba en cuenta que le habían controlado y probablemente el les hubiese dado lo suficiente para poder hacerlo.

La orden le llegó a los oídos, cada palabra le golpeó. Sus ojos se clavaron en los suyos y de un momento a otro se sintió completamente confundido. Asintió aunque no estaba seguro de estar procesando nada, no es que quisiera hacerlo, le miró con desconcierto y correspondió torpemente a aquel beso, quejándose cuando sintió las uñas sobre su piel y la sangre en sus labios. Sin embargo, era imposible que le pidiese que se detuviera, eso pensó hasta que salió de su cuerpo, una protesta salió de sus labios al momento. Le vio por lo bajo cuando se recargó en la pared sonriendo de esa forma. Apretó los labios mientras tomaba aire.

Cuando se acercó y tomó su brazo estuvo a punto de decirle que esperara, pero solo pudo verle un segundo antes de verse contra la mesa y sentiro entrar de golpe nuevamente en su interior, por el desconcierto alzó la voz en una exclamación hundiéndose en la mesa. Sus manos se aferraron a la lisa superficie del mismo modo que sus pies buscaban mantenerse firmes en el suelo. Alzó las caderas al sentir su mano colarse hasta tocarle de aquella manera. Abrió más las piernas sintiendo que le temblaban. Ya no sabía nada, la mente se le nublaba, sentía el dolor y sentía aquel placer malsano que le provocaba, pero había algo diferente, porque además sintió aquel miedo aparecer de repente cuando su mente quiso escaparse justo antes, cuando le había hecho mirarle. Cerró los ojos y movió las caderas dejando que su cuerpo y sus manos le marcaran el ritmo. La piel le ardía, sentía todo de una forma extraña y sintió que iba a perder la consciencia, una mera sensación del momento. Giró el rostro para intentar verle un momento, una sonrisa, apenas perceptible se dibujó en sus labios.

No supo que hacer y cuando lo abrazó solo pudo soltarse a llorar -Lo siento... no te disculpes, es mi culpa...- No importaba lo que él dijese, realmente noimportaba lo que saliera de sus propios labios -Esta bien para mí, pero no puedo soportar verte así- No sabía que le pasaba -La expresión inaccesible d etu rostro, es eso... cuando te veo así... no puedo - Sus manos le rodearon -Esa necesidad de sentir dolor.... pero no quiero causártelo a ti...- Su cuerpo? Estaba bien, estaba acostumbrado, no podía evitarlo... pero su rostro le había recordado viejos tiempos y eso desencajaba todo el cuadro. Beso suavemente su rostro -No necesitas hacerlo.. -sonrío apenas visiblemente mientras le veía -... no te amoldes a mi alma, porque está destrozada... no dejes que te hunda conmigo...- Si, él no quería hacerle eso a nadie. Si hubiese podido mantener a raya sus recuerdos no sería de ese modo, pero tal vez era lo mejor... saber desde ahora que debía dejar de hacer eso... después de todo, ahora lo tenía a él ¿no es cierto? -Pero no temas dañarme... - Cerró los ojos sintiendo su frente contra la suya -Si no quieres hacer esto, esta bien... lo siento... - Acarició con sus manos su rostro, sin verle, solo sintiendo su piel debajo de sus palmas. Se acercó besando sus labios con calma.

Aquel miedo irracional al sentir a alguien cerca estaba allí de nuevo, pero esta vez la diferencia es que no quería apartarse. Pero estaba confundido con sus palabras, no porque no las entendiera, es que no comprendía cómo es que eso estaba sucediendo. Abrió los labios en un amago de decir algo, pero solo se quedó en el intento, no pudo decir nada... no sabía que decir ni qué hacer... Aquella forma en la que solía ser, su seguridad y su forma de actuar se desvanecieron como el humo que se dispersaba con una ráfaga de aire, tan simplemente pudo ver sus ojos como si no creyese en lo que decía.

¿Hablaba en serio? No quería responder con ligereza, él podía decir una cosa, pero se conocía lo suficiente para saber que su actitud podía ser la contraria de un momento a otro. No supo cuántos segundos o minutos pasaron hasta que finalmente dijo algo - No me lo pidas... No voy a mentir, no sé cómo podrías lograrlo... No conozco otra forma, pero para eso estás aquí ¿no es cierto? ... - ¿Qué decía? No sabía, estaba hecho un lío tan solo por unas cuantas frases -Enseñame un camino diferente, no pidas permiso - Le vio confundido -¿Desaparecer? No sé a qué te refieres con eso - Negó con la cabeza, ya no sabía nada, pero estaba seguro de una sola cosa...

-Quiero estar contigo- murmuró suave mientras se perdía en sus pupilas.

Aquello era .. ¿cómo decirlo? Tal vez irreal. Se quedó sobre la cama sin moverse hasta que volvió por él y asintió sonriendo y siguiendolo al baño. La sensación del agua sobre su cuerpo fue de algún modo reconfortante. Cuando se vio acorralado le vio clavando sus ojos azules en aquellas pupilas, dejó de respirar por unmomento al sentirle tan cerca, pero un momento después era el quien se acercaba, atraído completamente a él, sus manos bajaron de su rostro a sus hombros al besarlo, no de aquel modo cuando buscaba seducir a alguien o tratando de provocarle, solo no había podido ir hacia sus labios en ese instante.

Se separó recargándose en la pared completamente, viéndolo y como esperando el siguiente movimiento. Pasó el pulgar por sus labios. Había sentido auel cosquilleo donde habían sido lastimados, era por el agua, pasó la lengua sobre ellos, bajando las manos por sus brazos y después por aquel torso bien formado.Había dejado de ver sus ojos siguiendo el camino que recorrían sus propias manos en ese instante.

Aún sin esa orden probablemente habría hecho justo eso. Se sentía como en otro mundo, perdido en todo aquello, se sostuvo, sin fijarse en la forma en la que lo hacía, gimeindo despacio al sentir aquella penetración,aquella sensación en el cuello le había hecho mover el rostro dándole espacio -Enséñame... Dime qué es lo que deseas...- aquella voz apenas audible, susurrante apenas y se escuchaba con el rumor del agua en aquel espacio, el golpear del agua hacía que aquello se tornara de una forma completamente diferente.

Oprimió su cuerpo contra el suyo, lento pero manteniéndose firme, sujetándose con fuerza como si eso fuese a darle el camino que debía seguir. Tenía que decir que le gustaba que lo dominaran, aún cuando el buscara dominar, era solo para probar que podía hacerlo, esta vez, no sentía esa necesidad, quería que el se apoderará por completo de su ser.

Dejo sali ligeros gemidos, sentirle salir solo para regresar a él de aquella forma le estaba haciendo sentir que estaba enloqueciendo. Cerró los ojos, besando la piel con lentitud, con el agua corriendo, sintiendo aquel recorrido, agua en lugar de fuego, la sensación era diferente. A pesar de haber hecho tantas cosas, el sentirse vulnerable frente a alguien le hacía actuar diferente, no sentía esa nececisad compulsiva de mentir o de huir de sus manos, muy al contrario, quería que fueran esas manos las que quemaran su piel...

Abrió los ojos con un ligero tinte de molestia al sentir que salía de su cuerpo, pero que desapareció tras ver su sonrisa. No tuvo que preguntar, se sostuvo de sus brazos besándole con ansías, sus gemidos quedaban atrapados allí, y el solo movía sus caderas sutilmente a sus movimientos. Mordió sus labios cuando necesito tomar aire para sentir que podía resistir sin perder completamente la cabeza. Respirba acariciando sus labios, sus manos apretando sus glúteos y pegándole más a sus cuerpo. Apenas un suspiro pronunciando su nombre, sentía que se le iban las fuerzas al sentirlo de esa manera.

Su cuerpo se movía, sin pensarlo siquiera, siguiendo el ritmo que le dabsa su cuerpo y sus manos sobre sus caderas. Sus manos se recargaban en los azulejos, y tomó la mano que se sostenía de la pared, jalándola sin mcha fuerza, haciendola ceder, para acercarla a sus labios, besando, lamiendo o mordiendo según sintiera la intensidad en sus movimientos. Había entrelazado sus dedos, pegando sus labios a la palma, respirando entrecortadamente y dejando que su aliento chocara contra ella, sus gemidos retumbando en aquel lugar, apagados por los demás sonidos, su cabello empapado pegándose a su rostro y sus ojos azules dejando ver el remolino que se deataba en su interior. No sabía qué hacer, estaba acostumbrado a acercarse a las personas, pero no sabía como llamar la atención de alguien que realmente le gustase, podía frente a otros fingir, pero se le habían desbaratado aquellas barreras con él, solo podía temblar de placer, dejarse llevar por él, incluso se sintió incapaz de provocarlo como lo hacía con todos. Le soltó finalmente para apoyarse completamente en la pared gimiendo con más fuerza al sentir como se movía tocando los puntos sensibles de su cuerpo.

Quería sentirlo de todas las formas posibles, sabía que aquello apenas comenzaba, acababa de conoecerlo pero que se sintiese de aquel modo estaba probando que a loq ue aspiraba podía ser posible, podía dejar de mentir y dejar que se le acercara, eso era algo que nadie había hecho sentir en él. Aún si le veía de ese modo ¿querría permanecer a su lado? Con aquella clara forma que tenía de pensar que él era alguien que no merecía algo como eso, eso no impide que puedas soñar con ello y si podía cumplirlo hará todo lo que estuviese en sus manos.

No iba a decirle, que a pesar de todo, de las veces que había buscado la compañía en otros, su cuerpo vibraba, se estremecía al sentir el suyo, de una forma distinta, que le hacía sentir tan diferente que le confundía. Sus palabras y su voz se volvían algo que le hacía estremecer hasta lo más profundo de su ser. Quería perderse completamente y resurgir de nueva cuenta de aquel laberinto que el mismo había forjado en todo ese tiempo. Observó el suelo al recargar su frente en la pared, incluso el sonido de aquello parecía distorsionarse, comos i fuese un plano diferente, solo podía sentir su respiración descontrolada, su cuerpo siendo tomado, la sensación de tenerle dentro de sí, moviéndose a ese ritmo, embistiéndole de aquella manera y haciendole perder la cabeza.

La vista se le nublaba, su cuerpo sucumbía a aquellas caricias, deseando más pero sintiendo que no podía mantener la cordura por más tiempo. Los sonidos que salían de su garganta eran más potentes, más roncos, normalmente buscaba contenerlos, pero en ese momento no estaba pensando en ello ni en nada más que no fuera la persona que lo estaba poseyendo en ese instante.

El calor se fue concentrando, haciéndose más intenso, estaba perdiendo el control, dejándose llevar por lo que le invadía. Se inclinó, acercándose a él, queriendo ver sus ojos, su rostro -Chris... ya no puedo...- Hablaba con los labios sobre la piel ajena. Sentía que aquello le estaba sobrepasando, ya no podía más resistirlo, lo sentía, que estaba llegando al clímax.

Muy pocas ocasiones como esa, no, era por estar con quien estaba, que los colores, las formas, todo se perdía entre auellas sensaciones. El calor, la húmedad que corría por su cuerpo. COmo si todo fuese en cámara lenta, desconociendo su voz de momento; murmurando su nombre, sintiendo que el mundo que le rodeaba se cubría de otros colores.

Su cuerpo se dejó vencer por el placer, dejando que alguien más le sostuviera. Ahí estaba de nuevo la esperanza que había perdido en los campos de batalla, sentía que tenía algo... alguien... por quien debía esforzarse...

Terminó por venirse en sus manos mientras sentía su cuerpo temblar por aquella fuerte sensación, él le llenaba, completaba el vacío que había en su alma. Estaba confiando en él aún sin conocerle, apenas unas horas y había logrado meterse en él, invadir aquel espacio que se prometió a sí mismo no dejaría a nadie tomar... porque él no era nada. La diferencia en este momento es que quería serlo todo para esa persona. Él que creía que el amor estaba vetado para alguien como su persona... por una vez, empezaba a creer.

Se separó de su cuerpo lentamente, girándose y recargándose en la pared, todo aquello le obligó a sostenerse de esa manera, viéndole con sus ojos azules, sonrío, la pred fría, el agua corriendo y él solo quería estar entre esos brazos. La tormenta desatada en su interior estaba tornándose en algo diferente que no comprendía del todo. Este era el inicio... No quería sufrir... pero hay cosas pro las que vale hacerlo. Se acercó a él pasando su brazos por su cuello -Entregaré todo de mí... para verte cada día junto a mí... - Una frase, solo una, no podía decir más.

Sonrío al verle con eljabón -Sólo si me dejas hacerlo también -Ladeó el rostro viéndole antes de darse la vuelta para que pudiera hacerlo -Es extraño.. nunca me he bañado con alguien más - pensó por mera inercia -Es decir, alguna vez cuando era niño con mi padre, pero fuera de eso...- Movió un poco la cabeza para verle -Eres una buena persona... seguro que quieres a alguien tan desequilibrado como yo a tu lado?- Era una broma, quería estar con el y no iba a dudarlo, aunque era cierto que él no tenía equilibrio, pero suponía que estar con alguien tendría que hacerle encontrarlo en algún punto. Eso creía... o quería que fuese así... por ambos...

-Chris...- No podía quedarse callado cuando estaba así. No quería decir nada en especial, solo hablar, no sabía ni de qué... nohabía podido evitar romper el silencio.

Se sonrojó pero no dijo nada al sentir sus labios sobre los suyos, no de momento -Si me tocas así es difícil mantener la cabeza fría...- se mordió el labio y ya que le tenía de frente, tomó el jabón en sus manos haciendo espuma en ellas para luego acercarlas a su cuerpo tallando su piel. Sonrió tranquilamente -No vayas a asustarte luego, por eso lo digo- Le veía atentamente el torso -Pero qué cuerpo el tuyo... - murmuró pasando sus manos por las líneas de sus músculos.Luego se observó -Yo me veo más... enclenque- Se ríe por sus propias palabras -Aunque creo que eres el único que me havisto luchar después del término de la guerra - Hizo una mueca, bien, debería sentirse culpable por lo que había pasado. Tendría que ir a disculparse con aquella chica.